Tres espacios mínimos, tres artistas, tres ilusiones encontradas en esta última caminata por Roma. Tres ensayos sobre la forma y las apariencias, sobre el pop-art y el kistch, sobre el disfraz y el trasvestismo en que hemos caido todos como piezas de Lego.
Immagini&Musica (V. della Croce, 63), de Roberto Mosolo, como homenaje de este artista polifacético a los grandes iconos del rock y el jazz, que ha montado toda una habitación con referencias epocales que envuelven a sus lienzos. Impresiona el realismo.
Lucia Tota quiere jugar en su galería del Trastevere (V. del Moro, 63) con el contravolumen del exceso anatómico, la esteatopigia, la ironía de la liposidad. Sus bailarinas y figurines acusan la prosapia de Botero aunque ella lo niegue. Es una cuchillada a la cultura en boga, a la anorexia.
Por último, con la lengua afuera, descubri este minusculo recinto donde descansa Batman a escala natural, custodiado por un rostro anciano en expresión de arrebato. Fue esta mi fotografia a hurtadillas, mi robo forzado, porque el descuido del comisario y del artista no me dio pista alguna de nombre, de fechas, ni de horarios. Pero valia la pena el homenaje aqui.