Tengo la certeza de que una de las zonas mas creativas en el mundo actual es Europa del Este. Entre las ciudades que merece revisitar antes de su ingreso en la Comunidad Economica Europea, está Budapest. Reseño mi último viaje a uno de los sitios más trendies que allí vi: El Szimpla.
Recordando el concepto de los patios berlineses, el Szimpla ocupa el corazón de un edificio desvencijado, en pleno barrio judío. Frecuentado por los jóvenes artistas húngaros, está decorado a base de trastos recogidos por la calle, desde lámparas, hasta divanes y televisores.
Se distribuye con una entrada que da a un loft agraffitado, un salón decorado con un look de los 60's, para dar paso a la amplia zona central, frente a la barra. Zona de lecturas donde el cliente abre su portátil o comparte con amigos juegos de mesa. Al final, una sala de cine alternativo. Y un permanente servicio de informacion con todo lo mas underground que pasa en esta legendaria urbe de dos orígenes, el austro-húngaro y el otomano.
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